Los compositores le han dado identidad cultural al país con su invaluable legado. SAYCO resalta su labor histórica y festeja de manera especial a los autores, del 27 de octubre al 1 de diciembre.
Por Uriel Ariza-Urbina
SAYCO está de gira por Colombia festejando a sus compositores, y recuerda la rica historia que hace de este país uno de los pueblos con mayor riqueza musical del mundo. “Si uno quiere conocer la historia de Colombia, debe buscarla en su música”, dijo una vez Gabriel García Márquez. No en vano Cien años de soledad fue considerada por él mismo como un vallenato de 450 páginas. Cada composición colombiana es un relato de historia, sentimientos y anhelos de las distintas regiones.Así ha sido desde los primeros cantos surgidos en el Caribe, hasta hoy. “Debe prohibirse el bunde la víspera de las fiestas, porque al día siguiente nadie quiere ir a misa por estar fatigados y de mala gana”, le respondió en una carta el Gobernador de Cartagena al Rey de España en el siglo XVIII. El culpable era un canto y baile provocadores e incitadores de parrandas.
“Y los que salen del bunde
pasado un rato regresan
guardando cierta distancia
para no engendrar sospecha.”
Poema musical del antioqueño Sinforoso Villa
Cada época de nuestra historia está contada con música. Guerras de independencia y guerras fratricidas, abolición de la esclavitud, nacimiento de la República, ideologías políticas, y hasta nuestros días, marcada por una pandemia que paralizó los eventos, pero no la creación musical.
Los primeros compositores usaron maderos, caña de millo, guacharaca de palma o el silbido con una hoja para hacer letras y melodías. Se cantaba y se bailaba romancero español, rituales indios y de negros para acompañar la jornada del campo y, después de la Guerra de los Mil Días, la composición dejó su huella política. Pero todas exaltan una cosa: el festejo de la vida.
“Ayer me echaron del pueblo
Mañana yo he de volver
Porque allí dejé mi rancho
Mis hijos y mi mujer”.
Ayer me echaron del pueblo, canción campesina de José A. Morales
Las primeras grabaciones fueron bambucos, pasillos y danzas, más tarde porros, cumbias y bullerengues, mientras el vallenato esperó su turno hasta los años 60, con un festival de acordeones que sacó del escondrijo a las leyendas de Alejo Durán, Luis Enrique Martínez, Abel Antonio Villa y Leandro Díaz.
“Voy hacerte una casa en el aire
solamente pa’ que vivas tú,
después le pongo un letrero muy grande
con nubes blancas que diga Ada Luz”.
La casa en el aire, célebre vallenato de Rafael Escalona
De pronto hubo una proliferación de canciones en los cuatro rincones del país. Los compositores adquirieron renombre y se les celebraba y se les bailaba, pero necesitaban que sus creaciones fueran protegidas y respetadas como debía ser. Colombia se ajustó a las normas internacionales para defender los derechos de autor, y así nació SAYCO en 1946, la entidad que hasta el día de hoy protege y hace respetar los derechos de miles de canciones del rico repertorio musical colombiano.
“En la vereda Velandia del municipio de Saboyá
una cucharita e’ hueso me regalaron por amistad
y la cucharita se me perdió, la cucharita se me perdió”.
La cucharita, canto popular de Jorge Velosa
En la Fonoteca de Señal Memoria hay un documento histórico que muestra cómo SAYCO se convirtió en el mejor aliado para los compositores y hoy está a la vanguardia en Latinoamérica. Hay una copia del disco SAYCO – Bodas de Plata, celebrando los 25 años de fundación, en 1971.
“Este es mi llano compadre, llanero, sí soy llanero primo
Y el que quiera comprobarlo, que vaya pa’l Casanare y pregunte en la costa el Pauto”.Llanero, sí soy llanero, canto pasaje del Cholo Valderrama
Hoy, Sayco festeja una vez más a los compositores y sus creaciones. Y los compositores exaltan también a SAYCO, por su labor diaria de velar y apoyarlos en la defensa de sus derechos y en sus necesidades de vida. Sayco, además, ha llevado a cabo en fecha reciente la tarea de llevar ayudas solidarias y de acompañamiento a muchos compositores en distintas regiones del país, como parte de su compromiso social y voluntario.El festejo de los compositores empezó en Arauca, Chocó y el municipio de San Juan del Cesar, La Guajira, y seguirá por las 17 sedes regionales de SAYCO en todo el país, para terminar el 1 de diciembre en Bogotá. ¡A festejar a los compositores!.